Las mujeres son la savia de las sociedades: Lakshmi

Lakshmi nació en Inglaterra en el seno de una familia acomodada. En la Universidad estudió Ciencia Política y Sociología, y fue durante este tiempo que tuvo el primer contacto con tradiciones orientales. Al terminar su carrera, se abrieron ante ella dos posibilidades: el mundo financiero o un viaje a la India. No fue difícil para ella optar por la segunda opción y a los veintidós años comenzó una travesía que ha durado veinticinco años.

Sin buscarlo, comenzó a sentir la profundidad de las tradiciones contemplativas. Durante meses recorrió lugares sagrados y compartió con diferentes maestros. Sin embargo, sería en los Himalayas, específicamente en el refugio tibetano de Dharamsalá, donde conocería a su maestro Premananda Deva, un occidental que durante cerca de cuatro décadas había vivido y estudiado diversos caminos de introspección, de la mano de la filósofa francesa Ananda Devi.

Durante quince años, Lakshmi permaneció al lado de su guía. Juntos ofrecieron conferencias y talleres en Asia, EE.UU. y Latinoamérica. En 2008, tras el fallecimiento de Premananda, Lakshmi asumió el liderazgo de la organización New Future Society. Durante una década, Lakshmi ha fundado centros de retiros en el Caribe colombiano; ofrecido retiros y talleres en diversas ciudades de Latinoamérica; acompañado procesos de crecimiento personales, de pareja y organizacionales, y cocreado las iniciativas Deleite Profundo, Hojas de Inspiración y #MEME Maratón de la Calma.

En estos veinticinco años de camino de autodescubrimiento y acción en el mundo, ha compartido con mujeres de diversas culturas; entrevistado transformadoras sociales y lideresas; trabajado con terapeutas y sanadoras, y descubierto la fortaleza femenina en diversos contextos. Hace cinco meses, durante un periodo de retiro, surgió la idea de tejer estas voces de inspiración y cambio en un solo lugar. Así nació Savias: Mujeres para el Futuro. En esta entrevista, Lakshmi comparte su visión sobre esta iniciativa que integra la cualidad de nutrición de la “Savia” con el conocimiento primario e integrador que atribuimos a las “Sabias”.

Ishwara: ¿Dónde has encontrado la inspiración para despertar tu faceta de “Savia” y cuáles son las motivaciones detrás de esta iniciativa?

Lakshmi: La organización New Future Society tiene 70 años de historia y su fundadora fue una mujer: Ananda Devi. Esta filósofa francesa, después de varios años de estudio y contacto con tradiciones de Oriente, establece en 1958 un centro de Cultura de la India en New York. Ella entabló diálogos con maestros espirituales, académicos, dignatarios y líderes de su tiempo, para invocar una integración entre Occidente y Oriente. Al mismo tiempo, promovía una visión más elevada del ser humano e instaba ir más allá de las limitaciones impuestas a la mujer. Una de mis principales inspiraciones es ella, pues hizo frente a grandes desafíos sociales por ser mujer independiente y por su voluntad de dar legitimidad a voces culturales diferentes a las hegemónicas.

Con respecto a la iniciativa “Savias: Mujeres para el Futuro”, este año hice un peregrinaje de tres meses a Japón y fue en este viaje que el proyecto comenzó a tomar forma. Hace años trabajo con terapeutas y juntas ofrecemos talleres en distintos países; conozco con frecuencia intelectuales, empresarias y lideresas sociales, y además he tenido la fortuna de acompañar mujeres de diversos sectores en la exploración y expansión de su potencial. Mientras estaba en mi peregrinar me di cuenta de que esas voces y experiencias estaban en mi memoria y mi corazón, pero no se hallaban disponibles para otras mujeres.

Una gran parte nuestro trabajo de crecimiento como mujeres está dirigido a evidenciar aquellos factores interiores y exteriores que nos limitan.

A medida que crecen los espacios de participación de la mujer, crecen las resistencias para el desarrollo y manifestación de lo femenino ¿Cuáles crees que son los mayores desafíos para que las mujeres puedan explorar esa sabiduría interior y exterior?

Precisamente, el primer ámbito que exploraremos en Savias será la identidad de la la mujer “Savia” hoy y para el futuro; es decir, el análisis del presente, sus dimensiones de sabiduría interior y su potencial para ser “savia” nutricia de la humanidad.

Una gran parte nuestro trabajo de crecimiento como mujeres está dirigido a evidenciar aquellos factores interiores y exteriores que nos limitan. En cada cultura existen concepciones y patrones colectivos que impiden la amplitud y elevación de la mujer. Estos modelos de pensamiento están en nosotras; por lo tanto, es fundamental un camino de introspección, sanación y diálogo con otras mujeres para sacar a la luz estos límites. Luego, es posible conectarnos con ese potencial innato y con la fuerza que surge del estar Juntas.

Estoy convencida de que los patrones y las limitaciones están en todos los seres humanos, pero nuestro talón de Aquiles es que durante milenios hemos recibido esa narrativa de minusvalía frente a los hombres, esas voces que nos dicen que “no podemos” y esa sombra social ha adormecido la inspiración para buscar la excelencia y la capacidad de realizarnos más allá de los deberes ser.

Durante 25 años has cultivado tanto filosofías y prácticas de Oriente y Occidente para el crecimiento personal, pero también te has desempeñado como lideresa de una organización internacional, que crea proyectos y apoya causas sociales ¿Qué llaves has descubierto como “Savia”, para conquistar esos desafíos interiores y exteriores?

Para mí siempre ha sido fundamental el cultivo de una conexión con la fortaleza interior. Habitualmente dedicamos tiempo y esfuerzo al desarrollo de nuestra personalidad exterior, y esta vía tiene aspectos valiosos como el logro de ciertas metas materiales y la adquisición de algunas capacidades cognitivas. Sin embargo, en mi experiencia cuando he tenido que hacer frente a grandes desafíos, llevar a cabo iniciativas mayores a mi capacidades o no he tenido la suficiente claridad, han sido el cultivo interior y esa fortaleza profunda mis verdaderas guías.

He recibido la influencia de filosofías y técnicas universales de contemplaciones, que han sido promovidas por diversas culturas y cada vez más, en su aspecto más secular, están siendo validadas por la ciencia. En la naturaleza de nuestras mentes hay posibilidades para acceder a a fuentes de sabiduría y creatividad superiores a las capacidades cognitivas que usamos diariamente. Con “Savias” me inspira la posibilidad de indagar caminos, historias y estrategias que evidencien estas profundidades y fortalezas internas.

La savia en algunas plantas es el líquido que nutre y permite el crecimiento, asciende desde las raíces hasta las hojas, para que toda la planta se eleve hacia su máximo potencial y hacia la luz.

¿Cuáles son los pilares de este proyecto y cómo se va a manifestar?

“Savias: Mujeres para el Futuro” tendrá tres pilares: Visión, Inspiración y Acción. En la Visión exploraremos la identidad de la mujer hoy y para el futuro. Invitaré terapeutas, pensadoras, maestras espirituales, trabajadoras del sagrado femenino, abuelas y artistas, para que juntas conversemos en videos y cursos sobre: ¿Quiénes somos como “Savias”?, ¿cuáles son nuestras llaves de inspiración? y ¿cómo podemos activar nuestro potencial? La savia en algunas plantas es el líquido que nutre y permite el crecimiento, asciende desde las raíces hasta las hojas, para que toda la planta se eleve hacia su máximo potencial y hacia la luz. Por ello, también será objeto de reflexión la pregunta: ¿Cómo puedo activarme para que mis acciones como Savia contribuyan al mejor futuro de la humanidad y el planeta?

La Inspiración se manifestará en entrevistas que serán publicadas en un canal de Youtube y en Hojas de Inspiración. Buscaremos las voces de lideresas sociales, emprendedoras, empresarias y académicas, que estén llevando a cabo cambios positivos para otras mujeres y sus comunidades. Escuchar sus testimonios, descubrir sus iniciativas y conocer sus motivaciones profundas formará un hermoso tejido sobre el movimiento de las mujeres para el nuevo futuro.

Por último, en la Acción conectaremos la sabiduría inherente, el poder del pensamiento, el despertar de la compasión y la voluntad de crear, para acompañar en red a las mujeres en situación de vulnerabilidad. Queremos acompañar sus procesos de diálogo profundo y cocreación, para que sean ellas las que movilicen la Savia en sus comunidades. Buscamos celebrar con ellas la sabiduría de ser mujer.

En varios encuentros has hablado de un feminismo integral o feminismo espiritual. ¿Qué características tendría este feminismo? ¿Qué entiendes por estos términos?

En diversos diálogos con amigas psicólogas, intelectuales, empresarias y lideresas algunas de ellas han optado por apartarse de algunas corrientes del feminismo como se manifiesta hoy en día. Soy una gran admiradora y defensora de los movimientos feministas, considero que ellos han puesto en la discusión pública los patrones y condicionamientos que han impedido el pleno desarrollo de nuestro ser. Gracias a estas valiosas mujeres comenzamos a recobrar el poder sobre nuestros cuerpos, mentes, voces y trabajo. Sin embargo, siento que en ocasiones la forma de comunicar el mensaje y los sentimientos detrás de los justificados reclamos acrecientan la conflictividad.

Insisto en que estoy de acuerdo con los reclamos, pero adhiero a una tercera vía en la cual se reconozca, celebre y potencie a la mujer como una fuente de fortaleza y determinación. Pero al mismo tiempo, donde se resalte su capacidad para tejer sociedades pacíficas. Existen en nosotras (también en lo masculino) energías amorosas, cuidadosas y compasivas. Siento que también en este ámbito podemos hacer una contribución, sobre todo en tiempos tensión social y crisis ambiental.

Es cierto que hombres y mujeres debemos hacer un trabajo para reconocer y desactivar individual y colectivamente las formas del patriarcado. Pero ver al otro como adversario y causa de todos nuestros problemas, muchas veces paraliza y aplaza el trabajo interior y colectivo. Sé que esta visión causa cierta animadversión en ciertos sectores, pero la mirada de un feminismo integral propone acercarnos a una Totalidad, reconocer la necesidad de consolidar comunidades, integrar la valiosa sabiduría de las “Savias” y asumir juntos los grandes desafíos de planetarios.

En este proyecto buscas integrar voces y caminos distintos. ¿A qué mujeres admiras y a quiénes te gustaría invitar a “Savias: Mujeres para el Futuro”?

Hay muchas mujeres que he conocido o leído y me inspiran. Una de ellas es la primatóloga inglesa Jane Goodall. Ella ha investigado y protegido primates en África por décadas. Además ha iniciado una revolución ambiental y social en niños y jóvenes, a través de su proyecto Roots and Shoots (Raíces y Retoños). También admiro a la psicóloga junguiana Jean Shinoda Bolen, por su valioso aporte desde los arquetipos a las diversas facetas de nuestra sabiduría como mujeres. Y por supuesto, una heroína de nuestro tiempo es la joven sueca de 16 años Greta Thunberg, quien se ha convertido en el rostro de la urgencia de una acción global por el clima.

En el contexto latinoamericano, tuve la fortuna de escuchar la semana pasada en el Encuentro Global +B, a la activista brasilera Marina Silva y la ambientalista ecuatoriana Yolanda Kakabatse. La inteligencia, lucidez y capacidad de movilización de estas mujeres son la esperanza de este continente.

Desde mi llegada a Argentina, hace cuatro años, he seguido el trabajo de la escritora Fabiana Fondevila y de la psicóloga transpersonal Virginia Gawel. En Mendoza, admiro a Lucía Pannocchia, por su compromiso con las mujeres de contextos rurales y en situación de encierro.

Siento un enorme entusiasmo con Savias, porque siento que aprenderé de cada mujer con quien me cruce y en esta sororidad podremos llevar a cabo iniciativas que mejoren la vida de otras mujeres.

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