Un vídeo musical hace nueve años cambió la dirección de su carrera. Hoy Nuno Gomes colabora con artistas como Ozuna, Tini Stoessel o Camilo. Su marca en la industria se caracteriza por la inclusión de historias humanas y la mirada amplia sobre temas sociales. Durante la pandemia, además incursionó en la educación, con la iniciativa gratuita en redes sociales la “Universidad de La Calle”.
Si alguien te pregunta: ¿cómo es un video de reggaetón o género urbano?, puede que tu descripción sea la de un artista rodeado por mujeres bailando, quizás con autos de lujo y en una fiesta estridente. Si esa es tu respuesta, después de esta nota podrás sumar otra visión: videos similares a películas, con historias humanas y mensajes de fondo.
Esa última descripción nos lleva a Nuno Gomes, director audiovisual venezolano, quien fundó la productora Compostela Films pensando en un campo de sueños y con la voluntad de volverlos realidad. Hoy, a sus 34 años, dirige desde Miami vídeos con artistas como Daddy Yankee, Tini Stoessel o Alejandro Sanz, y Ozuna lo ha descrito como “su director favorito” –han hecho juntos más de 35 videos.
Así mismo, Nuno se define como un soñador y un luchador: “Que quiere ser feliz y sonreír, cree en el bien común, considera que los buenos son más que los malos y vale la pena luchar por cosas que nutran y tengan un significado más allá del dinero”.
Justamente, el contacto con Hojas de Inspiración se dio a través de Instagram (@nunodirector), una red donde armó “La Universidad de la Calle,” y donde hoy comparte sus conocimientos de forma gratuita a través de la iniciativa “Walkie Talkie”.
Mis primeras historias se fundamentaron en finales alternativos, que hicieran llorar, generaran polémica o debate. Y los personajes eran personas que no solían aparecer en frente de una cámara.
Los inicios
Desde chico, Nuno Gomes soñó con hacer cine, una tarea difícil por temas económicos. Iniciada la carrera y con algunos trabajos interesantes, el cantante venezolano Víctor Drija le propuso hacer un videoclip (foto 1). “Yo pensé que era una experiencia más para el CV. ¡Nunca me imaginé que nueve años más tarde estaría hablando contigo hoy, con más de 270 vídeos!”, contó Nuno.
Mauricio Manini Williams: Como director, ¿cuál es tu marca?
Si tú vas y cuentas la misma historia de los otros, ¿cómo vas a destacar del montón? Tienes que hacer historias que te nazcan, te motiven, y lograr que la gente pueda ver tu trabajo.
Mis primeras historias se fundamentaron en finales alternativos, que hicieran llorar, generaran polémica o debate. Y los personajes fueron personas que no solían aparecer en frente de una cámara, con una discapacidad física o con cáncer. Manejé temas como el Alzheimer o la pérdida de un hijo… Son historias que no son comerciales, pero con las que cualquiera puede vincularse.
¿Qué cambió al salir de Venezuela?
Yo me fui hace seis años a Miami, en 2016. En tierras extranjeras las reglas del juego son distintas. Aquí no era sólo tener al artista cantando, sino que debía incluirlo en un papel dentro de una historia, con un clímax y un desenlace.
Antes se decía que los videos emocionales sólo eran para las baladas, y gracias a Dios nosotros rompimos ese cliché. Mostramos que también podemos hacerte llorar con reguetón. Además, fue mi oportunidad de saciar mi apetito de hacer cine, y podía contar mis historias.
Siempre hay un vídeo, brother, que toca la vida de alguien y uno no sabe cuándo es, pero debe estar preparado para el reto.
Llegar a otros
¿Has recibido mensajes de personas que hayan sido inspiradas por tu trabajo?
¡Sí, a través de las redes sociales! El vídeo Me voy enamorando de Chino y Nacho con Farruko inspiró a las personas con cáncer, a creer que puede haber un mañana donde pueden volver a amar. Eso les dio fuerza.
Muchas personas pidieron matrimonio con el vídeo Andas en mi cabeza de Chino y Nacho con Daddy Yankee. Otras conectan con los abuelitos en La bicicleta de Alkilados. Lo lindo es poder mover esas fibras emocionales.
Varias madres me agradecieron que hiciera un vídeo de Juan Magan, donde se manifiesta que no se debe abandonar una vida por más difícil que sea la situación. Una chica que usa silla de ruedas me dijo que lloró viendo el video de Daniel Well Qué fácil es quererte, porque nunca pensó que alguien como ella pudiera protagonizar un video.
¿Alguno de esos casos te impactó de forma directa?
Una vez en Caracas, Venezuela, hacíamos un curso para recaudar fondos para una ONG que trabaja con niños con cáncer. Al final estábamos haciendo fotos y llegó un chico corriendo, me abrazó fuerte llorando y me dijo: “Gracias, gracias”. Yo tenía miedo sobre qué le pasaba y él me dijo: “Gracias, me salvaste la vida”.
Me contó que vivió cosas terribles. Había decidido quitarse la vida en su cuarto y de golpe escuchó una melodía desde la cocina. En el canal HTV pasaban el vídeo La estrategia de Cali y el Dandee. Se sumergió en la historia, empezó a llorar y no podía creer que se hubiera conmovido tanto.
Ahí buscó mi nombre, se enteró de que estaría en Caracas y cinco días después estaba frente a mí, con la idea firme de vivir y contar historias. Yo empecé a llorar y quedamos en que todos los 18 de todos los meses me cuente en Instagram cómo está, y así lo hace hasta ahora.
¿Sabés?, a mí no me importa si a la gente no le gusta mi trabajo o me critican, que un video mío haya servido para salvar la vida de alguien, para mí eso vale todo. Quizás para eso vine a esta vida. Siempre hay un vídeo, brother, que toca la vida de alguien y uno no sabe cuándo es, pero debe estar preparado para el reto.
Graduado en la “UDC”
Durante la pandemia iniciaste el proyecto la “Universidad de La Calle”. ¿Cómo fue la experiencia?
Una gran parte de mi carrera la aprendí trabajando, desde el armado de vestuario hasta la organización de un casting, y tuve muchos tropezones. En una entrevista, en chiste dije que me gradué en la “UDC”, ¿y esa cuál es?: la Universidad de La Calle.
Siento que la vida me dio mucho y correspondía devolver un poco, dándoles a otros información que a mí me hubiera gustado tener. Entonces en 2020, con una pausa forzosa para todos por la pandemia, comencé a generar estos vivos de Instagram con amigos del medio que respeto y admiro muchísimo. Lo llamé la “Universidad de La Calle”.
Fue una experiencia linda, entre 50 y 60 capítulos con profesionales de arte, sonido, iluminación, dirección, entre otros. Mucha gente agradece que sea algo público y gratuito, no se paga una masterclass ni una membresía para acceder. Se puede consultar en Instagram, YouTube y Spotify.
El contenido tiene una importancia clave, cada plano tiene siempre una reacción en la vida de alguien.
¿Cómo continuó tu relación con seguidores y estudiantes?
En los lives veía que mucha gente tenía preguntas y no podía responder, entonces se planteó el cambió: ¿Qué tal si son personas al azar que me llaman y hacen una pregunta general ante otros que estén ahí? Ahí surgió Walkie Talkie: yo me conecto y respondo las preguntas que van surgiendo. No me considero profesor ni creo tener la última palabra, pero quizás mi experiencia o mi perspectiva sirvan.
Creo que el ser humano trabaja en función de la inspiración. Si tienes un “imposible” y ves que alguien común lo hace, eso se vuelve posible. Espero ayudar a dar ese empujón a esa persona que quizás esté bloqueada por la familia, los amigos o la pareja. A mí me dijeron que haciendo vídeos musicales no podría comer y hoy lo hago.
Para finalizar, ¿qué es lo que te inspira?
Me inspira aquello que genera una emoción. El día que decidí ser director no fue viendo Coppola o Martin Scorsese, sino viendo Austin Power 2. ¡Me reí tanto que perdí el control de mi cuerpo! Ahí dije: “Qué cool poder generar esto”. Entonces descubrí que quería generar emociones, quería hacer llorar y reír.
Lo que sea que hagas puede cambiar la vida de otra persona. Ahí también está la responsabilidad social de nosotros los directores en lo que hacemos. El contenido tiene una importancia clave, cada plano tiene siempre una reacción en la vida de alguien.
Créditos fotográficos: Cortesía del entrevistado. Portada: Nuno Gomes durante un rodaje. Foto 1: Vídeo de Victor Drija Amanecer. Foto 2: Con Daddy Yankee. Foto 3: Con Camilo y Ozuna.
