Cada año, en América Latina y el Caribe se generan cerca de 216 millones de toneladas de residuos sólidos, según registros de la División de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). El 52% corresponde a residuos orgánicos, en tanto que un 19% son materiales con gran potencial de ser reciclados (papel, cartón, vidrio y metales) y 12% son plásticos. De todo ese volumen, sólo el 4,5% se recicla. En Argentina, asegura un estudio de la ONU, el promedio de lo que se recicla no supera el 6%. Más de la mitad de la población (53%) sabe poco o nada sobre el tratamiento, separación y reciclado de la basura. Por ello, cada propuesta que avance en ese sentido merece el reconocimiento y la difusión para un necesario “efecto contagio”.
En Hojas de Inspiración queremos acercarte 5 proyectos latinoamericanos que hoy están haciendo la diferencia.
Circo reciclado
Con el lema “Una forma divertida de cuidar el planeta”, esta singular compañía surge en 2013 con la meta puesta en concientizar acerca del cuidado del ambiente, la reutilización de materiales reciclables y el reciclaje de residuos. Y lo hace con una propuesta más que atractiva: a través espectáculos educativos (uno de ellos se llamó “Reduzco, reuso, recirco”), animaciones y talleres en escuelas, teatros, festivales y ferias de consumo responsable en Argentina, Uruguay, Bolivia, España y Nueva Zelanda. Puestos a definir lo que hacen, ellos dicen muy serios: “Diseñamos e implementamos programas artísticos de sensibilización para promover el cuidado ambiental y el desarrollo sustentable. Realizamos espectáculos educativos de circo, animaciones temáticas y talleres lúdicos participativos para todo tipo de evento”. Con base en el Abasto, Ciudad de Buenos Aires, el equipo de reciclado está conformado por artistas circenses, docentes y ambientalistas que unen arte y conciencia para generar un cambio positivo.
Reciclarg
Desde Mendoza, esta empresa de triple impacto creada en 2011 por los hermanos Farid y Andrea Nallim recicla residuos eléctricos y electrónicos, brindando soluciones a personas, empresas e instituciones. De esta manera contribuye a aliviar al planeta y a construir una economía circular. Especialistas en RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos), en su planta ubicada en Guaymallén cuentan con procedimientos para convertirlos en un recurso, en un proceso que incluye separación, clasificación y tratamiento. También apuestan al diseño artesanal y único en base a los RAEE, creando artículos de moda y accesorios, regalos empresariales y juegos. Además, entre otros tantos servicios, gestionan Puntos Limpios para empresas y organismos públicos y privados. En 2022 esta firma, que ya le ha encontrado destino al 90% de los desechos RAEE que procesa y fue destacada por la revista Forbes, aspira llegar al tratamiento de 120 toneladas.
Re Accionar
En 2018 un grupo de estudiantes y profesionales de Buenos Aires apasionados por producir un cambio en su realidad creó Re Accionar. Lo hizo uniendo sus conocimientos para poder ofrecer opciones de consumo responsable y soluciones sustentables a personas, empresas y emprendimientos. Conscientes de que el tratamiento de los residuos es un problema mundial más que grave, y que sólo una escasa cantidad se recicla, para revertir este alarmante panorama toman a los residuos como materia prima para desarrollar máquinas que transformen los residuos y así reinsertarlos en el mercado como objetos útiles y duraderos. También hacen docencia acerca de la importancia del cuidado del medio ambiente a través de charlas, talleres y contenidos en redes sociales.
Xinca
Creada en Mendoza en 2013 por tres amigos (Alejandro Malgor, Ezequiel Gatti y Nazareno El Hom), esta empresa que fabrica ecozapatillas nació con el objetivo de generar un impacto positivo en la sociedad a partir de un compromiso social y ambiental. En base al dato de que en el país se desechan 100.000 toneladas de neumáticos al año, apuntaron fuertemente a recuperar parte de ese caucho para confeccionar las suelas del calzado y le sumaron los residuos textiles, para completar un producto que destaca por su moderna estética. El círculo perfecto cerró con la incorporación laboral de internos del complejo penitenciario de San Felipe para la confección del calzado. Actualmente, algunas personas que han recobrado la libertad trabajan en los talleres de esta ascendente Empresa B que demostró que calidad, moda, inclusión y reciclaje pueden ir juntos y dar un resultado más que exitoso.
Eloísa Cartonera
Esta editorial artesanal, que nació en 2003 como cooperativa de trabajo en el barrio de La Boca, Buenos Aires, se vale de cartones y papeles recuperados de la basura. Años después, esta iniciativa activó una serie de “proyectos cartoneros” no sólo en el resto de la Argentina, sino también en varios países de Latinoamérica. La propuesta resultó igualmente seductora para escritores nóveles como también para unos cuantos consagrados que aportaron y aportan textos inéditos para prestigiar aún más este proyecto. La particularidad es que estos libros son armados en su totalidad por los y las cartoneros/as que día a día rescatan esos materiales de las calles de Buenos Aires. A partir de la editorial se empezaron a gestar, entre otros, talleres de huertas ecológicas, como plataforma para más iniciativas sustentables que garanticen un trabajo digno a mujeres y hombres desocupados o en precaria situación laboral.
Créditos fotográficos: Portada: Circo Reciclado. Foto 1: Reciclarg. Foto 2: Reaccionar. Foto 3: Xinca. Foto 4: Eloísa Cartonera.